Balada de Gumersindo

Letra y música de Virulo



Gumersindo fue a La Habana a buscar al hombre nuevo
y llevaba en su morral las obras de Carlos Marx,
el diario de Guevara y por supuesto el Capital.

Una caja de condones pa' romper con el bloqueo,
por si llega a conocer a una ardiente guerrillera
también trajo su playera con una foto del Che.

Vio en la playa una nativa con las masas oprimidas
esa tanga que la cubre lo hizo pensar en la crisis de octubre
como Nikita Kruschov sus cohetes emplazó
y ella con aquella sonrisa le dijo "papi, vas muy deprisa".

Como obrero de avanzada cortejó a la compañera
le habló del imperialismo, de la globalización
mientras ella le pedía su carta de invitación
revolucionariamente ella habló del consumismo,
con su mismo calcetín, con su mismo pantalón,
con su mismo par de tenis, con su mismo camisón

A una tienda de divisas fueron a comprar deprisa,
como dos capitalistas unos vestidos muy diversionistas
él decía "vida mía, dónde está tu ideología";
ella dijo "papi, yo creo que hoy para mí se rompió el bloqueo".

Con regalos ni con charlas consiguió politizarla,
mientras más le describía al imperio explotador,
ella más se perfumaba con su esencia Christian Dior.

Transcurrió así la semana, tuvo que dejar La Habana,
pero comenzó a extrañar no a Fidel ni a Carlos Marx,
sino a aquella mulatona que lo puso a guarachar.

Regresó a los pocos días, ya no habló de ideologías,
con carta de invitación, visa, papeles, boleto de avión,
se llevó a la mulatona a vivir a su país,
no habló más del imperialismo y to' el mundo fue feliz.

Luis Lagarto iluminador novohispano

Por Marco Fabrizio

1
En 1988 Guillermo Tovar de Teresa publicó un libro formidable en el que presenta el estudio más profundo que se ha realizado sobre los miembros de la familia de apellido Lagarto, iluminadores que engalanaron con su arte cientos de libros corales de las catedrales de México y Puebla durante los siglos XVI y XVII. Como fruto de sus investigaciones se desvanecen muchas lagunas existentes sobre el origen y la formación de Don Luis Lagarto patriarca de la rama novohispana de la familia. Además de la excelente investigación documental, el libro presenta una gran cantidad de trabajos que no se habían dado a conocer como las hermosas capitulares que presentamos, las cuales fueron localizadas por el autor en un libro de coro perteneciente a la catedral Metropolitana.

2
Don Luis natural de Sevilla ya se encontraba en la ciudad de México en 1586 lugar en que trabajó hasta 1600 año en que parte a la ciudad de Puebla con el encargo de decorar 103 libros de coro para la catedral . fue iluminador, miniaturista y se convirtió en maestro mayor del arte de leer, escribir y contar en la Nueva España. La combinación de sus oficios, su solida formación en Granada y el influjo de la realidad novohispana dieron como resultado algunas de las capitulares mas bellas y originales creadas en esos tiempos. Guillermo Tovar no duda en afirmar que Luis Lagarto como iluminador fue el más relevante del manierismo en el mundo hispánico. Su quehacer no se limitó a las capitulares de libros corales, iluminó libros y realizó numerosas miniaturas destacando por su belleza las que decoran los escudos de monjas. De su obra existen numerosas muestras tanto en México como en España, el abandono que sufre en la actualidad contrasta con la fama de que gozó en el pasado. Durante el siglo XIX su obra fue muy buscada por coleccionistas, como restos de aquella fama quedan algunos libros corales mutilados por delincuentes.

3
El libro de Guillermo Tovar de Teresa rescata del olvido la obra de los Lagarto, se convierte en útil catálogo de sus creaciones y piedra fundamental en futuras investigaciones.

Para no abundar más repetimos lo que escribiera Don Luis Lagarto en 1616.

Opus laudat Artificem

Tovar de Teresa, Guillermo. Un rescate de la Fantasía : El ARTE DE LOS LAGARTO. ILUMINADORES NOVOHISPANOS DE LOS SIGLOS XVI y XVII. España, Ediciones del Equilibrista, 1988. 242 pp.

Ilustraciones.
1.- Capitular " O " p.111. 2.- Capitular " G " p.103. 3.- Capitular " Q ". p.101.